La vida es más sencilla de lo que creemos. Nosotros mismos los peros ponemos. No nos entendemos.
Y te das cuenta, al final del camino. Que ni me perdí, ni te perdiste; nos perdimos.
PD.: sonríe, aunque sea una sonrisa pintada. Algún día esa sonrisa a mala gana, podría hacer feliz a alguien.
No hay comentarios:
Publicar un comentario