Hablemos gramaticalmente.

Mi vida es una oración. Yo soy el sujeto, el que "protagoniza" la oración. Tú eres el verbo, que indica la acción que realizo; sin tí mi oración no tendría sentido puesto que no hago nada. Nuestra historia es el predicado; el que dice qué, cuando, por qué, cómo y dónde ocurrimos.

Llegó, la persona menos pensada, en el momento más enredado de su vida. Desatando todos esos lazos que ella había formado. Deshaciendo las ideas que un día alguien le susurró. Rompiendo todas las promesas que en tantas tardes le prometieron. 
Llegó, como el sol resplandiente en una tarde de invierno.

No habla. Pincha varias veces la ventana del chat. Nada, ni una sola palabra. En estos momentos lo detesta. Mira por la enorme ventana que ocupa casi por completo una de las paredes de aquella habitación. Los pájaros, el cielo, una pareja de enamorados que pasa en ese mismo instante por allí... -que felices se les ve. 
Se levanta y camina hacia la cama. Observa detenidamente su imagen reflejada en el espejo. No es la misma que ayer. 
Sin embargo, hay algo dentro de ella que le pide volver a verle.

ENTÉRATE; que no todos son capaces de ver lo que hay en ti, sin fijarse antes en tu físico. Que no todo el mundo te apreciará por muy buenas intenciones que tengas. Que te toparás con gente maleducada, que se reirán de ti, y tú tendrás que aguantarte, por no buscar un problema. Que las apariencias engañan. Que la persona que tanto te hizo sufrir te podrá hacer feliz con solo un pequeño gesto. Que te hacen daño porque tú lo permites. Que todo lo malo siempre tendrá algo bueno; y que a veces lo bueno no será como parece. Que te insultarán para enmascarar un <te quiero>. Que el que una vez estuvo en tu contra, ahora tal vez haría todo lo posible para que no te hiciesen nada. Que a veces tendrás que dejar ir a quien quieres. Que te enamorarás tontamente. Que la distancia no importa si hay amor de verdad. Que todo lo que tengas que ocultar a tus padres es malo. Que olla hierve, olla que reboza. Que la vida puede girar y cambiar en tan solo un segundo. Que la distancia no hace el olvido, el olvido lo hace las personas. Que el fin no siempre justifica los medios. Que el primer paso siempre es difícil. Que el primer beso no siempre es el más bonito. Que nada es para siempre. Que  los <te quiero> no siempre son verdad. Que <siempre> es un <sí> que nunca acaba. Que el tiempo lo pone todo en su sitio. Que el primer amor a veces permanece ahí. Que los pequeños detalles del momento son los más importantes. 
Que hay gente más ignorante que tú. Que por cada error que cometas te harás 0,1% más grande. Que habrá gente que te odie y te juzgue mal sin conocerte. Que la vida está para enamorarse y desenamorarse. Que te aferrarás en querer a personas nuevas que entrarán en tu vida. 
Que veces la vida cambia. Y esa persona especial que quieres encontrar, ha estado años a tu lado. 

                          <Siempre> es un <sí> que nunca acaba. 

No dependas de nadie en este mundo, porque hasta tu sombra te abandona cuando estás en la oscuridad.

Nunca ignores a una persona que te ama y cuida de ti, porque un día puedes darte cuenta de que has perdido la luna contando las estrellas.

Todos queremos tener la razón, pero sería conveniente perderla ocasionalmente por alguien.

        Y con solo pensar en verlo con otra, sería capaz de cruzar el océano a nado. 

              
                            A veces lo dulce no sería tan dulce, si no existiese lo amargo. 

-¿Trato hecho?

Hagamos un trato. Para mí serás mi princesa. Te enseñaré las vocales y los colores, me haré la dormida cuando llegues tarde. Te haré patatas fritas muchos días, y tartas de limón para los cumples. A cambio de eso, yo no te pido nada, simplemente, que estés conmigo. 
Ese es el trato. 

Trato hecho.

Hagamos un trato. Yo te llevo el desayuno a la cama, no digo una vez, eh; digo todos los días de mi vida. 
¿Fútbol? lo justo. Algún partidillo...poco más. Y te prometo que jamás tendré tripa. 
A cambio de eso no te pido nada, simplemente, que estés conmigo. Ese es el trato. 

La vida tiene que tener momentos de locura, sino se reduciría todo a un puñado de lunes.

Hay que luchar por lo que quieres, o por quien quieres, cueste lo que cueste… 

¡PERO LUCHA!

Mi babe (L)

Y es que ya no hay lágrimas que valgan,
ni misterios que cuidar, 
sólo la mísera certeza, 
de que nada será igual.

Maldita Nerea - abrí los ojos. 

¡Por esos momentos que se merecen música de fondo!

-Tío, ¿cómo se llama tu amiga?

-Jajaja, ya me lié con ella. 

-He preguntado su nombre, no cual fue su error...

Se escribe "celos", pero se pronuncia "miedo a perderle". 

-Si esto es un <adiós>, entonces es que los <para siempre> no exsisten. 

Sum 41

Cuando no puedo dormir invento mi vida perfecta.